La iniciativa contempló la participación de representantes de CONAF, INJUV, el colegio El Arrayán, la municipalidad y vecinos. La institución forestal, a través de su programa “Un chileno, un árbol”, donó quillayes, maitenes, molles y huinganes.

Profesionales de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), voluntarios del Instituto Nacional de la Juventud (INJUV), estudiantes del colegio El Arrayán, funcionarios del municipio local y vecinos plantaron 80 árboles nativos, de las especies quillay, maitén, molle y huingán, en el estero de Casablanca.

Con este intenso trabajo, el grupo dio inicio a un proyecto de largo plazo, que apunta a la recuperación de un sector abandonado y antaño reconocido por su gran belleza natural.

Al respecto, el director nacional de INJUV, Mirko Salfate, comentó que “estamos muy contentos con los alumnos del Colegio El Arrayán de Casablanca, la gente de CONAF, los voluntarios de “Vive Tus Parques”, los representantes de la municipalidad y una serie de actores que se congregaron para mejorar un lugar, no solo en su aspecto paisajístico, sino también en su aspecto comunitario. Los jóvenes participantes fueron capacitados para realizarlo y lo importante es que acá se siembra futuro, una señal de una generación comprometida, no solo con su colegio o su ciudad, sino que con su región y su país”.

Por su parte, la coordinadora regional del INJUV, Samira Chahuán, destacó que “todo esto se genera en el marco de las celebraciones del Mes de la Juventud, ya que tenemos un gran compromiso con todos los jóvenes de nuestra región. Nos comprometimos a llegar a cada rincón y en esta oportunidad son 80 jóvenes los que se han comprometido a plantar árboles. Ahora que queremos fomentar aún más el voluntariado juvenil, la participación ciudadana y el liderazgo, porque soy una convencida que los jóvenes son agentes de cambio para la sociedad”.

Sobre la actividad, el encargado regional (i) de la Sección de Ecosistemas y Sociedad de CONAF, Felipe Gajardo, explicó que  “el objetivo es aumentar la cobertura arbórea y este aumento se hace con cuatro tipos de árboles que pueden llegar hasta los 20 o 25 metros de altura. Esto lo realizamos en la ribera del estero de Casablanca y lo que buscamos es recuperar espacios que estaban perdidos, gracias al convenio que hay con INJUV y la Municipalidad de Casablanca. Estamos contentos de este proyecto y la idea es mantenerlo en el tiempo”.

Finalmente, el profesor del colegio El Arrayán, Víctor Vera, manifestó que “este proyecto consiste en una arborización y recuperación de un espacio público que, yo creo, es super anhelado por la gente de Casablanca. Antiguamente este era un lugar que la gente utilizaba como balneario porque corría mucha agua por este lado, pero hoy en día está abandonado. Sin embargo, con este proyecto queremos recuperar este espacio y, con esto, se adquiere un compromiso con los niños, con los jóvenes y las organizaciones para un cuidado permanente de los árboles que se están plantando”.

La iniciativa, que se replicará próximamente en Concón, se enmarca en los programas “Vive tus Parques” y “Un chileno, un árbol”.